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FUENTE: CARLIN

Creemos reflexión, generemos conciencia

Iulia Hernando

Disolver, disolver temporalmente el Congreso de la República, hasta la aprobación de una nueva estructura orgánica del Poder Legislativo.

Alberto Fujimori.

Publicado: 2018-01-22

Una profunda crisis social y política aquejaba nuestra realidad en los años 90, Alberto Fujimori (AF), ex Presidente de la República del Perú, junto a Montesinos, su fiel asesor, se apoderaban del poder como si fuera una batuta que solo ellos podían poseer, haciendo caso omiso a la división de facultades y a nuestras instituciones que son, en teoría, las cuales deberían garantizarnos la democracia... ¿El resultado? El pluralismo que en algún momento tuvimos desapareció mucho tiempo de nuestro radar. 

La mayoría de personas conocen los delitos por los cuales AF fue procesado y sentenciado por 25 años… Implantó un terrorismo de Estado mediante un grupo paramilitar llamado Colina, el cual se encargó de matar, desaparecer y hacer la búsqueda –no tan búsqueda- de la pacificación del país, un chiste cruel y pervertido. Nos robó como si fuéramos niños inconscientes en un patio de juegos, como si nunca nos fuéramos a dar cuenta. Hizo de la política un juego macabro donde las reglas y leyes lo dejaban de ser, para convertirse en premisas generadas y colocadas por él y por su gente. Todo esto y más generaron un vacío y una realidad política totalmente inestable en el país.

Hoy por hoy, es inevitable la indignación y la molestia al darme cuenta de que este hombre quien violó masivamente nuestros derechos humanos está libre gracias al “indulto humanitario” concebido por el actual presidente Kuczynski. Un indulto que es más una broma de mal gusto que una facultad otorgada al Jefe de Estado por la Constitución. PPK se burló de todo un país, de su sistema jurídico y de su pueblo al otorgarle el indulto a una persona que nunca se disculpó por los crímenes que cometió por tanto tiempo. Un indulto que tiene como significado el hecho de que Pedro Pablo siga siendo nuestro presidente, porque no fue más que la salvación de su pellejo… Y no pudo hacerlo de una manera más repudiable, ya que hizo su manifiesto un 24 de diciembre, como para que la gente no salga de sus casas, como para que la sociedad no alce su voz de protesta. Vaya que se equivocó. Lo ratificó mediante un mensaje a la nación que no me deja más que una sensación adusta y de profunda tristeza y preocupación. “Excesos y errores” ¿Es así como ahora se le llaman a los crímenes de lesa humanidad, corrupción, peculado y usurpación de funciones cometidos por el señor Fujimori? Su mensaje no fue más que una reafirmación del por qué tomó esta, al parecer, apresurada decisión. Un canje político, una escapada de la vacancia por un indulto a una persona que no la merece.

Si yo siento y pienso todo esto, teniendo 18 años, sin memoria alguna de todo lo ocurrido y poseyendo como conocimiento lo contado por mis padres, lo visto en sendos documentales y lo escuchado en las calles y en los medios de comunicación, yo me pregunto… ¿Cómo se deben estar sintiendo los familiares de las víctimas de los atentados en Barrios Altos, Cantuta y Pativilca? No dejo de pensar en todas las personas asesinadas, desaparecidas forzosamente, enterradas y quemadas. No dejo de pensar en sus familiares aún vivos, o en las 300 mil mujeres a las cuales les violaron sus derechos al esterilizarlas forzosamente.

No dejo de pensar en ellas, no quiero y no lo haré. Y así es y he decidido que se de esa forma, porque esta clase de actos son deplorables, y no pueden ser olvidados como parte de nuestra siempre triste historia y menos por nosotros, que tenemos el futuro saltando en nuestras manos. Son eventos que nos marcaron y que hoy por hoy, más que nunca, no podemos permitir que se nos borre de la mente, ya que aquel hombre que le hizo tanto daño al país, a nuestra democracia y a nuestra gente, está libre, está libre y no creo que PPK pueda elaborar algo para voltear al país de esta montaña rusa que al parecer no hace más que permanecer de cabeza.

Hay que tener presente que de nosotros depende la estabilidad política del país de aquí a un par de años más. Seremos nosotros quienes elijan a las autoridades quienes canalizarán nuestro poder. Nosotros tenemos el poder, no nos confundamos más. Ya es hora de un gobierno sin corrupción, ya es hora de una sala de congreso con gente capaz y no bruta que parece tener solo una conexión neuronal. Es tiempo de una política sin manchas permanentes, preocupémonos por obtenerla, ayudémonos y que algo como lo que estamos viviendo actualmente no se vuelva a repetir nunca más.


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